lunes, 26 de octubre de 2020

Hoy, Jesús te dice:

 


SALMO 40
2 "Esperaba, esperaba al Señor, él se inclinó hacia mí y escuchó mi clamor, 
3.me sacó de la fosa fatal del barro del pantano; puso mis pies sobre roca y aseguró mis pasos. 
4.Puso en mi boca un cántico nuevo, de alabanza a nuestro Dios. Muchos al verlo temerán y pondrán su confianza en el Señor. 
5.Feliz el hombre que cuenta con el Señor, que no escucha a los cínicos ni se pierde en sus mentiras
6.¡Cuántas maravillas has hecho, Señor, mi Dios, cuántos proyectos en favor nuestro! Nadie se te puede comparar. Yo quisiera publicarlas y contarlas, pero son demasiado para enumerarlas. 
7.No quisiste sacrificios ni ofrendas- lo dijiste y penetró en mis oídos- no pediste holocaustos ni víctimas. 
8.Entonces dije: "Aquí estoy, de mi está escrito en el rollo del Libro.
9.He elegido, mi Dios, hacer tu voluntad, y tu Ley está en el fondo de mi ser".

Feliz día bendecido por el Señor.

sábado, 24 de octubre de 2020

Sábado. Día de La Virgen.

 Tomado de Puntadas Marianas y esta  su vez de societyomary.blogspot.com.ar 

Nuestra Señora de los Ermitaños. 24 de octubre. 
Miles de peregrinos cada año se dirigen al norte de Suiza, en Einsiedeln, para venerar a Nuestra Madre. Allí, se encuentra una imagen tallada en madera en estilo gótico tardío, pintada de carbón negro y de aproximadamente un metro de altura. Esta imagen data de una antigüedad cercana a unos quinientos años, pero su historia espiritual se remonta otros 600 años. ¿Quién es ella?

Vestida con brocados elegantes bordados con acentos florales de oro con oro batido nubes y relámpagos estallan a su alrededor , la Virgen Negra de Einsiedeln reside en el centro de uno de los grandes lugares de peregrinación en Europa . Ella sostiene al Niño Jesús en su brazo izquierdo , y que a su vez tiene un pájaro negro. Tanto la madre y el niño tienen el pelo de oro y coronas de oro. Su mano derecha agarra un cetro majestuoso y poderoso, mientras que una cadena con un Sagrado Corazón cuelga de su brazo.

Esta imagen está entronizada en la basílica de la abadía benedictina de Einsiedeln. Pequeñas placas pintadas adornan las paredes del templo como ofrendas votivas de los devotos que desean conmemorar su profundo agradecimiento a la Virgen por su curación o la intervención en sus vidas. Las muletas y aparatos ortopédicos se han descartado al lado de la capilla, con la devoción sincera del suplicante sanado. En la confirmación, los "libros milagrosos" oficiales de los registros Monasterio muchos informes de las intervenciones de la Virgen Negra.


La historia de San Meinrad

La historia escrita de la Virgen Negra de Einsiedeln comienza con la historia de San Meinrad. Él nació en el castillo de la familia en Sulchen durante los últimos años del siglo VIII , durante el reinado de Carlomagno. Habiendo tomado los votos de un monje benedictino a la edad de veinticinco años, Meinrad buscó una soledad más completa a medida que pasaban los años, y así entró en el Bosque de Finsterwald, en el norte de Suiza, mientras se acercaba a los cuarenta años de edad.

Un día en el bosque, Meinrad notó que los halcones estaban amenazando a dos crías de cuervos que anidaban en un árbol de altura. Él rescató a los cuervos, los alimentó y los crió . Meinrad también construyó una celda para él mismo, con una capilla anexa dedicada a la Santísima Virgen. Los dos cuervos , según la leyenda , se quedaron a su lado hasta el fin de sus días, que ocurrió en el año 861. Una mañana , mientras celebraba la misa, que preveía su propio asesinato , ocurrido ese mismo día.

La actual Basílica está situada sobre la ermita original de Meinrad . El nombre de la ciudad " Einsiedeln " significa " La Ermita ". Tras la muerte de Meinrad , otros sacerdotes y monjes vinieron a vivir en las células que se construyeron alrededor de la capilla original de Meinrad . San Eberhard, un noble francés, llegó a Einsiedeln en 934 y fue el primer abad de la comunidad benedictina que se había reunido allí. Colocó los monjes bajo la protección de "Nuestra Señora de los Ermitaños".


Invitación del Papa Francisco a rezar El Rosario

El Papa Francisco invitó a ser fieles en la costumbre de rezar el Rosario, sea en comunidad o en familia. El Pontífice recordó que en el mes de octubre, tradicionalmente dedicado a Nuestra Señora del Rosario se acostumbra rezar diariamente el Rosario; por ello, el Papa invitó a ser “fieles a su costumbre de rezar el Rosario en sus comunidades y, sobre todo, en las familias”.

Además, el Santo Padre recomendó que “al meditar todos los días sobre los misterios de la vida de María a la luz de la obra salvífica de su Hijo, compártanle sus alegrías, sus preocupaciones y sus momentos de felicidad”.

Recemos, pues, en estos días finales de octubre especialmente, el Santo Rosario y hagámoslo costumbre durante todo el año. Feliz día. Bendecido por El Señor y La Virgen María.  

viernes, 23 de octubre de 2020

Hoy, Jesús te dice:

 

"Entonces Jesús preguntó al padre: «¿Desde cuándo le pasa esto?» 22.Le contestó: «Desde niño. Y muchas veces el espíritu lo lanza al fuego y al agua para matarlo. Por eso, si puedes hacer algo, ten compasión de nosotros y ayúdanos.» 23.Jesús le dijo: «¿Por qué dices "si puedes"? Todo es posible para el que cree.» 24.Al instante el padre gritó: «Creo, ¡pero ayuda mi poca fe!»"
Marcos 9, 21-24

Todo es posible si puedes creer. La FE mueve la mano de DIOS. Atrévete a CREER

Feliz día, bendecido por el Señor.


jueves, 22 de octubre de 2020

Adoración Eucarística.

 

Oración 

Señor, vengo a ti para que me guíes 
por el sendero que conduce a ti 
pues solo en ti hallo paz para mi corazón. 
Señor, vengo a ti para que me alivies 
pues yo confío plenamente en ti 
y sé que me darás la sanación. 

Señor, dame tu gracia santificadora 
para crecer espiritualmente 
y poder adorarte en espíritu y verdad 
en todo momento, lugar y hora. 
Quiero que estés siempre en mi mente 
oh, Señor, porque eres la misma bondad 

Señor, sé que Tú siempre me cuidas 
como el buen pastor a su rebaño 
tu vara y tu cayado me sosiegan, 
tus manos sanan mis heridas 
y evitan que el maligno me haga daño. 
Que tus poderosas manos me protejan. 
 Amén.

Hoy, Jesús te dice:

Te haré entender y te enseñaré el camino en que debes andar. Sobre ti fijaré mis ojos. Salmo 32, 8

En el camino se presentarán muchos obstáculos, pero nunca olvides que no estarás solo. Dios siempre estará contigo porque Él así lo prometió.
 

Feliz Día. Bendecido por el Señor

miércoles, 21 de octubre de 2020

Vidas Ejemplares.


Santa Laura Montoya nació el 26 de Mayo de 1874, en Jericó, Antioquia. Sus Padres fueron Juan de la Cruz Montoya y Dolores Upegui.

El nombre que tuvo la primera santa colombiana, no fue escogido por sus padres, sino por el sacerdote que la bautizó el mismo día que nació. El padre quería nombrarla Dolores y su madre quería Leonor, pero el presbítero la nombró Laura. Este último se deriva de laurel que significa inmortalidad

A la edad de cinco años, el abuelo materno llevó a Dolores Upegui y a Laura Montoya a vivir al departamento de Amalfi. Allí realizó su primera comunión. De Amalfi pasó al pueblo de Donmatías, en donde su madre residió algunos meses, ejerciendo de maestra. Luego fue a residir en Medellín, en el barrio Robledo. 

Ella fue una víctima del sectarismo partidista, vivió tiempos turbulentos: revoluciones, la devastadora Guerra de los Mil Días y sus consecuencias. Estudio en la Normal Antioqueña de Medellín y fue profesora en distintos colegios. Fue directora del Colegio la Inmaculada de Medellín.

En 1907 fue nombrada oficialmente como maestra en la pequeña población de Marinilla, a pocos kilómetros de Medellín. Estando en esa población como maestra, una tarde después de terminar sus clases fue a visitar el Santísimo, tuvo su encuentro místico con la Paternidad de Dios, cumbre de su experiencia trinitaria.

Laura Montoya Upegui, movida por el Espíritu de Dios, decide a "catequizar" personalmente a los indios. Concibe una comunidad diferente que se sale de modelos existentes para realizar una misión liderada por mujeres y llevada a cabo en lugares selváticos e incomunicados. Por tal motivo crea una congregación que se pone al nivel del indígena, del negro y marginado. Vive, comparte y trata de pensar como ellos, se deja guiar por el amor, no impone por la fuerza sino que convence con el testimonio, con la vida misma de pobreza, humildad, sencillez, bondad y amor eficaz. 

Con la aprobación de Monseñor Maximiliano Crespo Obispo de Santa Fe de Antioquia, con un pequeño grupo de mujeres esforzadas sale hacia la región del Urabá antioqueño, donde la selva y los ríos se entrecruzan. Entonces El 4 de Mayo de 1914, se empezó con el ánimo de ser maestras y catequistas.

Luego, el 7 de agosto de 1914, con el fin de explorar el terreno y buscar modos y lugares dónde establecer centros misioneros, o de visitar los enfermos distantes y darles enseñanza transitoria. Eran esas excursiones realizadas de la manera más prudente, aunque no dejaban de ser de mucho peligro por lo desconocido. En estas correrías, como en general en todo el trabajo apostólico, Dios obró verdaderos prodigios en favor de los indios.

Desde enero de 1949 su salud empezó a decaer notoriamente, día tras día. Sus fuerzas, antes inagotables, para el trabajo intelectual, iban disminuyendo y gustaba entonces de entretenerse en arreglar hilos y sedas para los indios, aunque se fatigaba. 

En semana santa de 1949, le aparecieron en las piernas unos lamparones rojos que le causaban acerbo dolor. A pesar de ello, asistió, en cuanto pudo, a los divinos oficios y reunió varias veces a la comunidad para platicarle de cosas del espíritu. El domingo de Pascua, que fue siempre para ella día de júbilo, lo pasó llena de decaimiento y de tristeza.

Ella falleció en Medellín el 21 de octubre de 1949. Al morir, su congregación tenía 467 religiosas y 93 novicias. Ayudó a fundar 122 casas, en donde se trabajaba con 22 tribus en tres países: Colombia, Venezuela y Ecuador.

En 2004 fue declarada beata de la Iglesia católica habiéndose conocido un milagro obrado por intercesión suya. En diciembre de 2012 se dio a conocer el veredicto por parte del grupo de evaluación del proceso de su canonización, según el cual, un segundo milagro fue obrado por intercesión suya, con lo que se completaron los requerimientos para su declaración como santa, lo que la convirtió en la primera santa de nacionalidad colombiana. El papa Francisco inscribió su nombre en el libro de los santos mediante la fórmula canónica en solemne concelebración eucarística en la plaza de San Pedro el 12 de mayo de 2013.​ Es la primera y única santa nativa colombiana.


Hoy, en el Día de Nuestra Santa Colombiana, Jesús te dice:

Salmo 149
"1.¡Aleluya! Cantad al Señor un cántico nuevo, cantad su alabanza en la asamblea de los fieles. 
2.Que Israel se regocije en su hacedor, y los hijos de Sión festejen a su rey. 
3.Alaben su nombre con la danza, toquen para él el tambor y la cítara, 
4.porque el Señor ama a su pueblo y corona de victoria a los humildes. 
5.Que los fieles se alegren de su gloria, y en sus lechos griten de alegría.

Feliz y bendecido día 

martes, 20 de octubre de 2020

Hoy, Jesús te dice:

 

Aprovechen el momento presente porque estos tiempos son malos. Efesios 6-16

Invierte tiempo y recursos en ti mismo, aprende a no juzgarte tan duro y a aceptarte tal y como eres, cree en ti y trátate como si verdaderamente te amaras. ¡No te arrepentirás! 

lunes, 19 de octubre de 2020

Hoy, Jesús te dice:

 

Porque te tomé de los confines de la tierra y de las tierras lejanas te llamé y te dije: Mi siervo eres tú; te escogí y no te deseché.  Isaías 41:9

¿Estás desesperado? Clama a Dios que solo en Él podemos esperar.

¿Sientes que tu vida no tiene sentido? Busca a Dios que solo Él tiene respuestas eternas.

¿Quieres ser amado? Pregúntale a Dios cuánto te ama, que desde antes de que nacieras soñaba contigo.

Feliz día. Bendecido por el Señor. 








jueves, 15 de octubre de 2020

Adoración Eucarística.


 Oración
Eterno Padre, yo te agradezco porque Tu infinito Amor me ha salvado, aún contra mi propia voluntad. Gracias, Padre mío, por Tu inmensa paciencia que me ha esperado. Gracias, Dios mío, por Tu inconmensurable compasión que tuvo piedad de mí. La única recompensa que puedo darte en retribución de todo lo que me has dado es mi debilidad, mi dolor y mi miseria.

Estoy delante Tuyo, Espíritu de Amor, que eres fuego inextinguible y quiero permanecer en tu adorable presencia, quiero reparar mis culpas, renovarme en el fervor de mi consagración y entregarte mi homenaje de alabanza y adoración. 

Jesús bendito, estoy frente a Ti y quiero arrancar a Tu Divino Corazón innumerables gracias para mí y para todas las almas, para la Santa Iglesia, tus sacerdotes y religiosos. Permite, oh Jesús, que estas horas sean verdaderamente horas de intimidad, horas de amor en las cuales me sea dado recibir todas las gracias que Tu Corazón divino me tiene reservadas.

Virgen María, Madre de Dios y Madre mía, me uno a Ti y te suplico me hagas partícipe de los sentimientos de Tu Corazón Inmaculado.

¡Dios mío! Yo creo, adoro, espero y te amo. Te pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan y no te aman. Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, te adoro profundamente y te ofrezco el preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, presente en todos los Sagrarios del mundo, en reparación de todos los ultrajes, sacrilegios e indiferencias con que El mismo es ofendido. Y por los méritos infinitos de su Sacratísimo Corazón y del Inmaculado Corazón de María, te pido la conversión de los pobres pecadores.

Vidas Ejemplares. Santa Teresa de Jesús.

Ruiza, M., Fernández, T. y Tamaro, E. (2004). Biografia de Santa Teresa de Jesús. En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea. Barcelona (España). Recuperado de https://www.biografiasyvidas.com/biografia/t/teresa_dejesus.htm el 15 de octubre de 2020.

(Gotarrendura, Ávila, 1515 - Alba de Tormes, 1582) Religiosa y escritora mística española, conocida también como Santa Teresa de Ávila. Teresa de Jesús es el nombre de religión adoptado por Teresa de Cepeda y Ahumada, hija de Alonso Sánchez de Cepeda, probable descendiente de judíos conversos, y de Beatriz de Ahumada, perteneciente a una noble familia abulense. Su vida y su evolución espiritual se pueden seguir a través de sus obras de carácter autobiográfico, entre las que figuran: La vida (escrito entre 1562 y 1565), las Relaciones espirituales, el Libro de las fundaciones (iniciado en 1573 y publicado en 1610) y sus cerca de quinientas Cartas.

La Vida abarca desde su infancia hasta la fundación del primer convento reformado de San José de Ávila, en 1562. Gracias a ella se sabe de su infantil afición a leer vidas de santos y los entonces populares libros de caballerías, que Miguel de Cervantes parodiaría en Don Quijote de la Mancha un siglo después. En 1531, su padre la internó como pupila en el convento de monjas agustinas de Santa María de Gracia, pero al año siguiente tuvo que volver a su casa aquejada de una grave enfermedad. Determinada a tomar el hábito carmelita contra la voluntad de su padre, en 1535 huyó de su casa para dirigirse al convento de la Encarnación. Vistió el hábito al año siguiente, y en 1537 hizo su profesión.

Por entonces empezó para ella una época de angustia y enfermedad, que se prolongaría hasta 1542. Durante estos años confiesa que aprendió a confiar ilimitadamente en Dios y que empezó a practicar el método de oración llamado «recogimiento», expuesto por Francisco de Osuna en su Tercer abecedario espiritual. Repuesta de sus dolencias, empezó a instruir a un grupo de religiosas de la Encarnación en la vida de oración y a planear la reforma de la orden carmelitana para devolverle el antiguo rigor, mitigado en 1432 por el papa Eugenio IV.

Empezó entonces a ser favorecida con visiones «imaginarias» e «intelectuales», visiones que habrían de sucederse a lo largo de su vida y que determinaron sus crisis para averiguar si aquello era «espíritu de Dios» o del «demonio». Su ideal de reforma de la orden se concretó en 1562 con la fundación del convento de San José. Se inicia entonces una nueva etapa en su vida, en la que la dedicación a la contemplación y la oración es compartida con una actividad extraordinaria para conseguir el triunfo de la reforma carmelitana.

Desde 1567 hasta su muerte, fundó en Medina del Campo, Malagón, Valladolid, Toledo, Pastrana, Salamanca, Alba de Tormes, Segovia, Beas, Sevilla, Caravaca, Villanueva de la Jara, Palencia, Soria y Burgos. En 1568 se erigió en Duruelo el primer convento reformado masculino, gracias a la colaboración de San Juan de la Cruz y del padre Antonio de Heredia. Redactó las Constituciones (1563), que fueron aprobadas en 1565 por Pío IV y que se basan en los siguientes puntos: vida de oración en la celda, ayuno y abstinencia de carne, renuncia de rentas y propiedades (comunales o particulares) y práctica del silencio.

Para ayudar a sus religiosas a la realización de su ideal de vida religiosa compuso Camino de perfección (escrito entre 1562 y 1564 y publicado en 1583) y Las Moradas o Castillo interior (1578). La reacción de los miembros de la antigua observancia carmelita llegó a su punto culminante en 1575, año en que denunciaron a los descalzos a la Inquisición. Un breve de Roma, en 1580, ordenó la separación de las dos órdenes.

En 1604 se inició el proceso de canonización de Teresa. En 1614 fue declarada beata y en 1622 fue canonizada por Gregorio XV. En 1970 fue proclamada doctora de la Iglesia, siendo la primera mujer que recibía esta distinción. Además de las obras citadas, dejó escritas las siguientes: Meditaciones sobre los cantares, Exclamaciones, Visita de descalzas, Avisos, Ordenanzas de una cofradía, Apuntaciones, Desafío espiritual, Vejamen y unas treinta poesías.

miércoles, 14 de octubre de 2020

Para reflexionar.

 



Esta es la historia de un par de hermanos que vivieron juntos y en armonía por muchos años aunque vivían en granjas separadas. Un día tuvieron un conflicto, este fue el primer problema serio que tenían en 40 años de cultivar juntos hombro a hombro, compartiendo maquinaria e intercambiando cosechas y bienes en forma continua. Comenzó con un pequeño malentendido y fue creciendo hasta que explotó en un intercambio de palabras amargas y fuertes, seguido de semanas de silencio.

Una mañana, alguien llamó a la puerta de Luis. Al abrir la puerta, encontró a un hombre con herramientas de carpintero. "Estoy buscando trabajo por unos días", dijo el extraño, "quizás usted requiera algunas pequeñas reparaciones aquí en su granja y yo pueda ser de ayuda en eso". -"Sí", dijo el mayor de los hermanos, "tengo un trabajo para usted".

Mire al otro lado del arroyo, en aquella granja vive mi vecino, bueno, de hecho es mi hermano menor. La semana pasada había una hermosa pradera entre nosotros pero él desvío el cauce del arroyo y convirtió la pradera en un lago artificial para que quedara entre nosotros. Él seguramente hizo esto para enfurecerme, pero le voy a hacer una mejor. ¿Ve usted aquella pila de desechos de madera junto al granero? Quiero que construya una cerca de dos metros de alto, no quiero verlo nunca más. El carpintero le dijo: "creo que comprendo la situación".

El hermano mayor le ayudó al carpintero a reunir todos los materiales y dejó la granja por el resto del día para ir por provisiones al pueblo. Cuando caía la tarde el granjero regresó y el carpintero justo había terminado su trabajo. El granjero quedó impactado. No había ninguna cerca de dos metros. En su lugar había un puente que unía las dos granjas a través del arroyo. Era una fina pieza de arte, con todo y pasamanos. 

En ese momento, su vecino, su hermano menor, vino desde su granja y abrazando a su hermano mayor le dijo:
-"Eres un gran tipo, hermano, mira que construir este hermoso puente después de lo que he hecho yo". Estaban en su reconciliación los dos hermanos, cuando vieron que el carpintero tomaba sus herramientas y se marchaba.
-"No, espera". "Quédate unos cuantos días tengo muchos proyectos para ti", le dijo el hermano mayor al carpintero.
"Me gustaría quedarme", dijo el carpintero, "pero tengo muchos puentes por construir". 

Muchas veces dejamos que los malentendidos o enojos nos alejen de la gente que queremos, muchas veces permitimos que el orgullo se anteponga a los sentimientos. Aprende a perdonar y valora lo que tienes. Recuerda que perdonar no cambia en nada el pasado pero si el futuro. No guardes rencores ni sentimientos de amargura que solo te lastiman, te alejan de Dios y de las personas que te quieren, aprende a ser feliz y disfruta de las maravillas que Dios ha creado. Él te ama y desea que tengas una vida dichosa, llena de amor y armonía. No permitas que un pequeño desliz malogre una gran amistad...Recuerda que el silencio a veces es la mejor respuesta...Una casa feliz es lo que más importa. Haz todo lo que esté a tu alcance para crear un ambiente en armonía. Recuerda que la mejor relación es aquella donde el amor entre dos personas es mayor que la necesidad que ellas tienen una por la otra..

martes, 13 de octubre de 2020

Salmo para orar desde el fondo del corazón.

 


SALMO DE ADMIRACIÓN DE LAS MARAVILLAS 
DE LA CREACIÓN 

¡Que grandes y maravillosas 
son tus obras Señor!, 
en todas ellas se refleja tu amor 
por ello te adoramos, te bendecimos 
y te damos gracias, Señor 
porque hiciste la tierra 
y todo lo bueno que hay en ella, 
el cielo y lo llenaste de estrellas 
la luna como faro de la noche 
y nos diste el sol como hoguera 
luminosa para calentarnos 
e iluminar nuestros días. 

Venid cantemos jubilosos 
a nuestro Dios y señor 
por la grandeza de sus obras, 
por las obras de sus manos, 
por las cumbres de los montes, 
los arboles del bosque, 
por el viento, la lluvia y el mar. 

Venid adoremos al Señor 
porque así como sus obras 
son grandes y maravillosas 
Él es grande y Todopoderoso 
Señor Dios Nuestro. 

Adoremos y alabemos a 
Nuestro Señor, Dios de vida. 
Postrémonos en tierra ante Él, 
para rendirle honor y gloria 
por la creación que nos ha dado 
nos rendimos ante Ti porque 
nos sentimos pequeños ante 
la maravillosa obra de arte 
que es tu creación 

Oh Dios, Tú eres todo, 
Tú eres la razón y el sentido 
de todo lo que existe, 
te damos gracias Dios 
Todopoderoso y eterno 
porque todo eso nos lo diste 
a nosotros que somos tus hijos 
por ello nos alegramos y saltamos 
de gozo en tu presencia, Señor.



lunes, 12 de octubre de 2020

Celebración Gozosa. Tres advocaciones de La Virgen hoy 12 de octubre.

 

Nuestra Señora del Pilar (Zaragoza - España)

La Virgen del Pilar es una advocación mariana de la Iglesia católica, cuya imagen tiene su principal centro de culto en la Catedral Basílica del Pilar de Zaragoza (España).

La leyenda sobre sus orígenes se remonta al año 40, cuando, de acuerdo con la tradición cristiana, el 2 de enero la Virgen María se apareció a Santiago Apóstol en Caesaraugusta. María llegó a Zaragoza «en carne mortal» —antes de su Asunción— y como testimonio de su visita habría dejado una columna de jaspe conocida popularmente como «el Pilar». Se cuenta que Santiago y los siete primeros convertidos de la ciudad edificaron una primitiva capilla de adobe a orillas del Ebro.​ Este testimonio es recogido por un manuscrito de 1297 de los Moralia, sive Expositio in Job, de Gregorio Magno, que se custodia en el Archivo del Pilar. La devoción mariana comenzó en los albores del siglo XIII, cuando comenzaron las primeras peregrinaciones a Santa María la Mayor.

Nuestra Señora de Zapopan (Guadalajara-México)


La historia de Nuestra Señora de Zapopan comienza cuando los Franciscanos tienen que enfrentarse a más de seis mil indígenas que no quieren renunciar a Xopizintli (su Dios), Fray Antonio de Segovia se enfrenta y sube al cerro del Mixtón sólo acompañado de la Zapopana. Al llegar donde los nativos se encontraban, un haz de luz sale de la virgen y los ancestros se rinden ante ella, Fray Antonio les da la imagen, y en su honor se realiza su iglesia en Zapopan que significa lugar entre zapote y villa del maíz.

Su primer título fue como pacificadora, protectora contra los rayos, las tempestades y la epidemia, ya que Guadalajara sufría en ese tiempo de la peste e inundaciones. El cardenal ordena llevarla a catedral y las tempestades cesan.

Añadió que se coronó como Reina del Lago en 2009 por el milagro que les concedió a todos los chapalanses, el lago se encontraba casi seco. La virgen vino a Chapala por primera vez en Diciembre de 1955. 

La virgen “original” se encuentra en la basílica de Nuestra Señora de Zapopan y no sale más que dos veces por año, una a catedral y otra a dar un paseo por el atrio de su iglesia. Existen cuatro réplicas, tres de ellas talladas en madera y una de marfil y esas son las llamadas peregrinas.

Cuando la virgen sale de la catedral de Guadalajara se reúnen aproximadamente tres millones de personas, las cuales aguardan por la noche para poder alcanzar a ver a Nuestra Señora de la Expectación de Zapopan, como también se le conoce. En el año 2004 la asistencia fue aproximada de cinco millones de personas. Una de las peregrinas visita los templos de Guadalajara. A partir del 18 de mayo hasta la Romería el 12 de Octubre.

Nuestra Señora de la Fe (Bélgica)

No muy lejos de la pequeña ciudad de Dinant, en el país de Lieja, cerca de un hogar perteneciente al señor de Celles, dos magníficos robles crecieron. Uno de los dos viejos árboles venerables fue derribado en el año 1609 para utilizar la madera. El trabajador que inspeccionó el árbol encontró en el interior una pequeña estatua de la Madre de Dios, entronizada, por así decirlo, con tres barras de hierro que servían de un enrejado. Al parecer, en algún momento en el pasado distante, algún alma piadosa cristiana había colocado la santa imagen en un hueco de la madera de roble, como si fuera un nicho. Luego, durante un período de tiempo, la apertura del árbol se fué cerrando gradualmente, y a medida que crecía, el árbol se escondió en su seno la figura preciosa.

En honor a la Virgen, la estatua fue exhibida posteriormente en el otro roble, una vez más detrás de una reja de hierro, por orden del Barón de Celles. En este nuevo santuario de la Madre de Dios fue honrada con el título de Nuestra Señora de la fe. Los que pasaban por ahí no dejaron de venerar la estatua; y hubo muchas curaciones inesperadas. Gracias de todo tipo se multiplicaron, y pronto los peregrinos comenzaron a reunirse a la zona debido a los milagros deslumbrantes.

Un sacerdote de la Compañía de Jesús había sido enviado recientemente a Gravelines. Él trabajó con diligencia para cultivar las almas, como sobre una vid fecunda, y por sus sermones excitados los pueblos de la región tomaron un mayor amor por la Madre de Dios. Al ver que esta devoción había echado raíces, se reunió con el magistrado local para discutir cómo mantener y aumentar la piedad del pueblo. Se decidió que debían hacer réplicas de la estatua de Nuestra Señora de la Fe, hechas de la madera de la primera encina. Cuando se completó la primera, se observó que la imagen tenía un gran parecido con el original.

domingo, 11 de octubre de 2020

Vidas Ejemplares. San Juan XXIII. El Papa Bueno.

 


Ruiza, M., Fernández, T. y Tamaro, E. (2004). Biografía de Juan XXIII. En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea. Barcelona (España). Recuperado de https://www.biografiasyvidas.com/biografia/j/juan_xxiii.htm el 11 de octubre de 2020.

(Sotto il Monte, 1881 - Roma, 1963) Pontífice romano, de nombre Angelo Giuseppe Roncalli (1958-1963). Era el tercer hijo de los once que tuvieron Giambattista Roncalli y Mariana Mazzola, campesinos de antiguas raíces católicas. Su infancia transcurrió en una austera y honorable pobreza. Parece que fue un niño a la vez taciturno y alegre, dado a la soledad y a la lectura. Cuando reveló sus deseos de convertirse en sacerdote, su padre pensó muy atinadamente que primero debía estudiar latín con el viejo cura del vecino pueblo de Cervico y allí lo envió.

Por fin, a los once años ingresaba en el seminario de Bérgamo, famoso entonces por la piedad de los sacerdotes que formaba más que por su brillantez. En esa época comenzaría a escribir su Diario del Alma, que continuó prácticamente sin interrupciones durante toda su vida y que hoy es un testimonio insustituible y fiel de sus desvelos, sus reflexiones y sus sentimientos. En 1901, Roncalli pasó al seminario mayor de San Apollinaire reafirmado en su propósito de seguir la carrera eclesiástica. Sin embargo, ese mismo año hubo de abandonarlo todo para hacer el servicio militar; una experiencia que, a juzgar por sus escritos, no fue de su agrado, pero que le enseñó a convivir con hombres muy distintos de los que conocía y fue el punto de partida de algunos de sus pensamientos más profundos.

El futuro Juan XXIII celebró su primera misa en la basílica de San Pedro el 11 de agosto de 1904, al día siguiente de ser ordenado sacerdote. Un año después, tras graduarse como doctor en Teología, iba a conocer a alguien que dejaría en él una profunda huella: monseñor Radini Tedeschi. Este sacerdote era al parecer un prodigio de mesura y equilibrio, uno de esos hombres justos y ponderados capaces de deslumbrar con su juicio y su sabiduría a todo ser joven y sensible, y Roncalli era ambas cosas. Tedeschi también se sintió interesado por aquel presbítero entusiasta y no dudó en nombrarlo su secretario cuando fue designado obispo de Bérgamo por el papa Pío X. De esta forma, Roncalli obtenía su primer cargo importante.

Dio comienzo entonces un decenio de estrecha colaboración material y espiritual entre ambos, de máxima identificación y de total entrega en común. A lo largo de esos años, Roncalli enseñó historia de la Iglesia, dio clases de Apologética y Patrística, escribió varios opúsculos y viajó por diversos países europeos, además de despachar con diligencia los asuntos que competían a su secretaría. Todo ello bajo la inspiración y la sombra protectora de Tedeschi, a quien siempre consideró un verdadero padre espiritual.

En 1914, dos hechos desgraciados vinieron a turbar su felicidad. En primer lugar, la muerte repentina de monseñor Tedeschi, a quien Roncalli lloró sintiendo no sólo que perdía un amigo y un guía, sino que a la vez el mundo perdía un hombre extraordinario y poco menos que insustituible. Además, el estallido de la Primera Guerra Mundial fue un golpe para sus ilusiones y retrasó todos sus proyectos y su formación, pues hubo de incorporarse a filas inmediatamente. A pesar de todo, Roncalli aceptó su destino con resignación y alegría, dispuesto a servir a la causa de la paz y de la Iglesia allí donde se encontrase. Fue sargento de sanidad y teniente capellán del hospital militar de Bérgamo, donde pudo contemplar con sus propios ojos el dolor y el sufrimiento que aquella guerra terrible causaba a hombres, mujeres y niños inocentes.

Concluida la contienda, fue elegido para presidir la Obra Pontificia de la Propagación de la Fe y pudo reanudar sus viajes y sus estudios. Más tarde, sus misiones como visitador apostólico en Bulgaria, Turquía y Grecia lo convirtieron en una especie de embajador del Evangelio en Oriente, permitiéndole entrar en contacto, ya como obispo, con el credo ortodoxo y con formas distintas de religiosidad que sin duda lo enriquecieron y le proporcionaron una amplitud de miras de la cual la Iglesia Católica no iba a tardar en beneficiarse.

Durante la Segunda Guerra Mundial, Roncalli se mantuvo firme en su puesto de delegado apostólico, realizando innumerables viajes desde Atenas y Estambul, llevando palabras de consuelo a las víctimas de la contienda y procurando que los estragos producidos por ella fuesen mínimos. Pocos saben que si Atenas no fue bombardeada y todo su fabuloso legado artístico y cultural destruido, ello se debe a este en apariencia insignificante cura, amable y abierto, a quien no parecían interesar mayormente tales cosas.

Una vez finalizadas las hostilidades, fue nombrado nuncio en París por el papa Pío XII. Se trataba de una misión delicada, pues era preciso afrontar problemas tan espinosos como el derivado del colaboracionismo entre la jerarquía católica francesa y los regímenes pronazis durante la guerra. Empleando como armas un tacto admirable y una voluntad conciliadora a prueba de desaliento, Roncalli logró superar las dificultades y consolidar firmes lazos de amistad con una clase política recelosa y esquiva.

En 1952, Pío XII le nombró patriarca de Venecia. Al año siguiente, el presidente de la República Francesa, Vincent Auriol, le entregaba la birreta cardenalicia. Roncalli brillaba ya con luz propia entre los grandes mandatarios de la Iglesia. Sin embargo, su elección como papa en 1958, tras la muerte de Pío XII, sorprendió a propios y extraños. No sólo eso: desde los primeros días de su pontificado, comenzó a comportarse como nadie esperaba, muy lejos del envaramiento y la solemne actitud que había caracterizado a sus predecesores.

Para empezar, adoptó el nombre de Juan XXIII, que además de parecer vulgar ante los León, Benedicto o Pío, era el de un famoso antipapa de triste memoria. Luego abordó su tarea como si se tratase de un párroco de aldea, sin permitir que sus cualidades humanas quedasen enterradas bajo el rígido protocolo, del que muchos papas habían sido víctimas. Ni siquiera ocultó que era hombre que gozaba de la vida, amante de la buena mesa, de las charlas interminables, de la amistad y de las gentes del pueblo.

Como pontífice dio un nuevo planteamiento al ecumenismo católico con el Secretariado para la Unidad de los Cristianos y el acogimiento en Roma de los supremos jerarcas de cuatro Iglesias protestantes. Su pontificado abrió nuevas perspectivas a la vida de la Iglesia y, aunque no se dieron cambios radicales en la estructura eclesiástica, promovió una renovación profunda en las ideas y las actitudes del cristianismo; su propósito pronto fue claro para todos: poner al día la Iglesia, adecuar su mensaje a los tiempos modernos enmendando pasados yerros y afrontando los nuevos problemas humanos, económicos y sociales. Para conseguirlo, Juan XXIII dotó a la comunidad cristiana de dos herramientas extraordinarias: las encíclicas Mater et Magistra y Pacem in terris. 

Poco antes de su muerte, acaecida el 3 de junio de 1963, Juan XXIII aún tuvo el coraje de convocar un nuevo concilio que recogiese y promoviese esta valerosa y necesaria puesta al día de la Iglesia: el Concilio Vaticano II. A través de él, el papa Roncalli se proponía, según sus propias palabras, "elaborar una nueva Teología de los misterios de Cristo. Del mundo físico. Del tiempo y las relaciones temporales. De la historia. Del pecado. Del hombre. Del nacimiento. De los alimentos y la bebida. Del trabajo. De la vista, del oído, del lenguaje, de las lágrimas y de la risa. De la música y de la danza. De la cultura. De la televisión. Del matrimonio y de la familia. De los grupos étnicos y del Estado. De la humanidad toda".

Se trataba de una tarea de titanes que sólo un hombre como Juan XXIII fue capaz de concebir e impulsar, y que sus herederos recibirían como un legado a la vez imprescindible y comprometedor. Pablo VI, su sucesor y amigo, declaró tras ser elegido nuevo pontífice que la herencia del papa Juan no podía quedar encerrada en su ataúd. Él se atrevió a cargarla sobre sus hombros y pudo comprobar que no era ligera. Casi cuatro décadas después, en el año 2000, Juan XXIII fue beatificado por otro papa carismático, Juan Pablo II; y, el 27 de abril de 2014, ambos fueron canonizados por el papa Francisco, el primer pontífice hispanoamericano de la historia de la Iglesia.

sábado, 10 de octubre de 2020

Sábado. Día de La Virgen.

 10 de Octubre

Día de Nuestra Señora del Claustro (Citeaux Francia)


El Papa Francisco pide que todos los católicos y todos los fieles, recemos de manera intensa y especialmente cada día del mes de octubre, el Santo Rosario, para que la Virgen María, “quien siempre estuvo a los pies de la cruz de Jesús y no se dejó vencer por el miedo”, ayude a la Iglesia en estos momentos de dolorosa dificultad; a la vez que invocamos el poder del Arcángel San Miguel, “jefe de los ejércitos celestes y protector de la Iglesia” (Apocalipsis 12, 7-9); para que la defienda de los ataques y trampas del maligno. Y así, el Papa nos invita al final del Rosario, a concluir recitando una de las invocaciones más antiguas a la Santa Madre de Dios; el “Sub Tuum Praesidium” : 
Bajo tu amparo nos acogemos,
santa Madre de Dios;
no deseches las súplicas
que te dirigimos en nuestras necesidades,
antes bien, líbranos de todo peligro,
¡oh siempre Virgen, gloriosa y bendita!

Historia. (Tomada de Wikipedia)

La abadía original se remonta a 1098 cuando Roberto de Molesmes llegó a Citeaux. El nuevo monasterio fue dedicado a honrar a la Virgen María bajo la regla de San Benito. Su magnífica iglesia no se completó durante casi otros 100 años en el año 1193. San Bernard de Clairvaux dejó Citeaux para fundar su monasterio de Claraval en el año 1115. Fue desde este lugar que las nuevas abadías cistercienses surgieron en toda Europa , en beneficio de toda la humanidad.

Nuestra Señora del Claustro se encuentra en Besancon. La imagen de Nuestra Señora, situada en el claustro de La Madeleine, fue preservada de un incendio, en el año 1624, aunque el lugar donde se encontraba fue reducida a cenizas.

El monasterio de Citeaux sufrió saqueos en varias ocasiones a lo largo de la Guerra de los Cien Años , y los monjes se vieron obligados a buscar refugio en otro lugar durante estos tiempos peligrosos. No fue sino hasta el siglo 16 antes de que la comunidad contará con más de 200 monjes , pero luego, con las guerras de religión el número de monjes comenzó a disminuir de nuevo.

Por último , en 1791 , la abadía fue alcanzada por los estragos de la Revolución francesa. La abadía fue vaciada por la fuerza y las estructuras casi completamente destruidas.

En 1898 Citeaux fue restaurada por los cistercienses y comenzó la reconstrucción. Aunque sólo partes de una biblioteca del siglo XV y otras dos estructuras que datan del siglo XVII y XVIII se mantuvieron. Posteriormente el gobierno vendió la propiedad.

Hagamos conocer y amar a la Virgen María


jueves, 8 de octubre de 2020

Adoración Eucarística.


 Oración

Oh Jesús, verdadero Dios y verdadero hombre, aquí presente en el Santísimo Sacramento del altar, creo todo lo que Vos, mi Señor, me habéis revelado. Arrepentido de todos mis pecados, esperando en Vos que nunca permite que sea confundido, agradeciendo por este don supremo, amándoos sobre todas las cosas en este Sacramento de vuestro amor, adorándoos en el misterio profundo de vuestra humildad, os manifiesto y hago patente todas las heridas y miserias de mi pobre corazón y os pido me deis todo lo que necesito y deseo.

Pero tan solo os necesito a Vos, oh Dios mío, tan solo os deseo a Vos, vuestra gracia y la gracia de usar debidamente vuestras gracias, poseeros en esta vida y poseeros en la otra.

Bendito seáis, oh poder divino de vuestro paternal Corazón, que aunque todo lo podéis, sin embargo, no podíais darnos un don más precioso que este Santísimo Sacramento.

Oh Pan celestial, gran Sacramento, os adoro y os alabo en todo momento. (repítase después de cada alabanza.)

Bendita seáis, oh Sabiduría del Verbo Divino, que todo lo sabéis y lo ordenáis, y sin embargo no sabíais prepararnos una comida más exquisita, que este Santísimo Sacramento.

Bendito seáis, oh Dios mío, que en vuestra inefable dulzura de amor os habéis transformado en este pan para dárosnos como el más dulce manjar.

Bendito seáis, oh Dios mío, que habéis encerrado todos vuestros misterios en esta humilde forma de pan terrenal. ¡Oh Trinidad Santísima!

Amén

miércoles, 7 de octubre de 2020

Oraciones para homenajear a Nuestra Señora del Rosario.

 Además del Santo Rosario, hoy y durante el resto de este mes podemos rezar a la virgen las oraciones que se muestran a continuación.

Oh María, oh dulcísima, oh dueña mía!. Vengo a entregarte lo poco que poseo yo, pues sólo tuyo soy para que lo pongas en oblación ante el Trono de nuestro Señor. Te doy mi voluntad, para que no exista más y sea siempre la Voluntad del Padre Celestial.

Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea, 
pues todo un Dios se recrea en tan graciosa belleza. 
A Ti, celestial princesa, Virgen Sagrada María, 
yo te ofrezco en este día, 
alma, vida y corazón. 
Mírame con compasión 
y no me dejes, Madre Mía. 


Oh Señora mía, oh Madre Mia, yo me ofrezco enteramente a ti. 
En prueba de mi filial afecto te consagro en este día, mis ojos, 
mis oídos, mi lengua, mi corazón, en una palabra, todo mi ser. 
Y ya que soy todo tuyo, oh madre de bondad, guárdame
 y defiéndeme como cosa y posesión tuya. Amén


Todos te deben servir, Virgen y Madre de Dios, 
que siempre ruegas por nosotros, y tú nos haces vivir. 
Tanta fue tu perfección y de tanto merecer, 
que de ti quiso nacer quien Es nuestra redención.


Acuérdate, oh piadosísima Virgen María, que jamás se ha oído decir que ninguno que haya acudido a tu protección, implorado tu socorro, o buscado tu intercesión ha sido abandonado. Animado por esta confianza, vengo a ti, oh Virgen de las vírgenes, mi madre querida. A ti vengo, delante de ti estoy, pecaminoso y doloroso. Oh, Madre del Verbo Encarnado, no menosprecies mis peticiones y en tu misericordia escucha y contesta a lo que te pido. Amén.

martes, 6 de octubre de 2020

Texto para Reflexionar.

 

DIOS NO EXISTE

Un hombre fue a una barbería a cortarse el cabello, y entablo una conversación con la persona que le atendió. De pronto, tocaron el tema de Dios. El barbero dijo: 
Yo no creo que Dios exista, como usted dice.
¿ Por qué dice usted eso? pregunto el cliente... 
Es muy fácil, al salir a la calle se da cuenta de que Dios no existe. O...dígame, acaso si Dios existiera, ¿habría tantos enfermos? ¿Habría niños abandonados? Si Dios existiera, no habría sufrimiento ni tanto dolor para la humanidad. No puedo pensar que exista un Dios que permita todas estas cosas. 

El cliente se quedó pensando, y no quiso responder para evitar una discusión. Al terminar de cortarse el cabello, el cliente salió del negocio y vio a un hombre con la barba y el cabello largo. Entró de nuevo a la barbería y le dijo al barbero. Sabe una cosa? Los barberos no existen.

¿Cómo? Si aquí estoy yo. 
No...!dijo el cliente, no existen, si existieran no habría personas con el pelo y la barba tan larga como la de este hombre. 
- Los barberos si existen, es que esas personas no vienen hacia mí. 
Exacto...! dijo el cliente. Ese es el punto. Dios si existe, lo que pasa es que las personas no van hacia Él y no le buscan, por eso hay tanto dolor y miseria. Y el barbero se quedó pensando...

lunes, 5 de octubre de 2020

Oraciones para rezar en cualquier momento y lugar

 

JESÚS EUCARISTÍA
Ven a mi cada día, Jesús Eucaristía.
Ven a mi corazón y haz de él tu morada.
Dame tu amor, tu paz, tu perdón y tu alegría.
Mi alma quiere sentirse por ti muy amada.

Amén.

 



GRACIAS SEÑOR
Gracias, Señor, por nuestras vidas.
Gracias, Señor, por la salud.
Gracias, Señor, porque Tú nos cuidas
Gracias, Señor, por la paz y la quietud.
Gracias, Señor, simplemente gracias.
Amén.






domingo, 4 de octubre de 2020

Vidas Ejemplares. San Francisco de Asís.

 El Hermano Francisco

Tomado de: Biografías y Vidas
La Enciclopedia Biográfica en línea

(Giovanni di Pietro Bernardone; Asís, actual Italia, 1182 - id., 1226) Religioso y místico italiano, fundador de la orden franciscana. Casi sin proponérselo lideró San Francisco un movimiento de renovación cristiana que, centrado en el amor a Dios, la pobreza y la alegre fraternidad, tuvo un inmenso eco entre las clases populares e hizo de él una veneradísima personalidad en la Edad Media. La sencillez y humildad del pobrecito de Asís, sin embargo, acabó trascendiendo su época para erigirse en un modelo atemporal, y su figura es valorada, más allá incluso de las propias creencias, como una de las más altas manifestaciones de la espiritualidad cristiana

Hijo de un rico mercader llamado Pietro di Bernardone, Francisco de Asís era un joven mundano de cierto renombre en su ciudad. Había ayudado desde jovencito a su padre en el comercio de paños y puso de manifiesto sus dotes sustanciales de inteligencia y su afición a la elegancia y a la caballería. En 1202 fue encarcelado a causa de su participación en un altercado entre las ciudades de Asís y Perugia. Tras este lance, en la soledad del cautiverio y luego durante la convalecencia de la enfermedad que sufrió una vez vuelto a su tierra, sintió hondamente la insatisfacción respecto al tipo de vida que llevaba y se inició su maduración espiritual.

Del lujo a la pobreza

Poco después, en la primavera de 1206, tuvo San Francisco su primera visión. En el pequeño templo de San Damián, medio abandonado y destruido, oyó ante una imagen románica de Jesucristo una voz que le hablaba en el silencio de su muda y amorosa contemplación: "Ve, Francisco, repara mi iglesia. Ya lo ves: está hecha una ruina". El joven Francisco no vaciló: corrió a su casa paterna, tomó unos cuantos rollos de paño del almacén y fue a venderlos a Feligno; luego entregó el dinero así obtenido al sacerdote de San Damián para la restauración del templo.

Esta acción desató la ira de su padre; si antes había censurado en su hijo cierta tendencia al lujo y a la pompa, Pietro di Bernardone vio ahora en aquel donativo una ciega prodigalidad en perjuicio del patrimonio que tantos sudores le costaba. Por ello llevó a su hijo ante el obispo de Asís a fin de que renunciara formalmente a cualquier herencia. La respuesta de Francisco fue despojarse de sus propias vestiduras y restituirlas a su progenitor, renunciando con ello, por amor a Dios, a cualquier bien terrenal.

A los veinticinco años, sin más bienes que su pobreza, abandonó su ciudad natal y se dirigió a Gubbio, donde trabajó abnegadamente en un hospital de leprosos; luego regresó a Asís y se dedicó a restaurar con sus propios brazos, pidiendo materiales y ayuda a los transeúntes, las iglesias de San Damián, San Pietro In Merullo y Santa María de los Ángeles en la Porciúncula. Pese a esta actividad, aquellos años fueron de soledad y oración; sólo aparecía ante el mundo para mendigar con los pobres y compartir su mesa.

La llamada a la predicación

El 24 de febrero de 1209, en la pequeña iglesia de la Porciúncula y mientras escuchaba la lectura del Evangelio, Francisco escuchó una llamada que le indicaba que saliera al mundo a hacer el bien: el eremita se convirtió en apóstol y, descalzo y sin más atavío que una túnica ceñida con una cuerda, pronto atrajo a su alrededor a toda una corona de almas activas y devotas. Las primeras (abril de 1209) fueron Bernardo de Quintavalle y Pedro Cattani, a los que se sumó, tocado su corazón por la gracia, el sacerdote Silvestre; poco después llegó Egidio.

San Francisco de Asís predicaba la pobreza como un valor y proponía un modo de vida sencillo basado en los ideales de los Evangelios. Hay que recordar que, en aquella época, otros grupos que propugnaban una vuelta al cristianismo primitivo habían sido declarados heréticos, razón por la que Francisco quiso contar con la autorización pontificia. Hacia 1210, tras recibir a Francisco y a un grupo de once compañeros suyos, el papa Inocencio III aprobó oralmente su modelo de vida religiosa, le concedió permiso para predicar y lo ordenó diácono.

Con el tiempo, el número de sus adeptos fue aumentando y Francisco comenzó a formar una orden religiosa, llamada actualmente franciscana o de los franciscanos, en la que pronto se integraría San Antonio de Padua. Además, con la colaboración de Santa Clara, fundó la rama femenina de la orden, las Damas Pobres, más conocidas como las clarisas. Años después, en 1221, se crearía la orden tercera con el fin de acoger a quienes no podían abandonar sus obligaciones familiares. Hacia 1215, la congregación franciscana se había ya extendido por Italia, Francia y España; ese mismo año el Concilio de Letrán reconoció canónicamente la orden, llamada entonces de los Hermanos Menores.

Por esos años trató San Francisco de llevar la evangelización más allá de las tierras cristianas, pero diversas circunstancias frustraron sus viajes a Siria y Marruecos; finalmente, entre 1219 y 1220, posiblemente tras un encuentro con Santo Domingo de Guzmán, predicó en Siria y Egipto; aunque no logró su conversión, el sultán Al-Kamil quedó tan impresionado que le permitió visitar los Santos Lugares.

Últimos años

A su regreso, a petición del papa Honorio III, compiló por escrito la regla franciscana, de la que redactó dos versiones (una en 1221 y otra más esquemática en 1223, aprobada ese mismo año por el papa) y entregó la dirección de la comunidad a Pedro Cattani. La dirección de la orden franciscana no tardó en pasar a los miembros más prácticos, como el cardenal Ugolino (el futuro papa Gregorio IX) y el hermano Elías, y San Francisco pudo dedicarse por entero a la vida contemplativa.

Durante este retiro, San Francisco de Asís recibió los estigmas (las heridas de Cristo en su propio cuerpo); según testimonio del mismo santo, ello ocurrió en septiembre de 1224, tras un largo periodo de ayuno y oración, en un peñasco junto a los ríos Tíber y Arno. Aquejado de ceguera y fuertes padecimientos, pasó sus dos últimos años en Asís, rodeado del fervor de sus seguidores.

Oración por la Paz
Señor, haz de mi un instrumento de tu paz.
Que allá donde hay odio, yo ponga el amor.
Que allá donde hay ofensa, yo ponga el perdón.
Que allá donde hay discordia, yo ponga la unión.
Que allá donde hay error, yo ponga la verdad.
Que allá donde hay duda, yo ponga la Fe.
Que allá donde desesperación, yo ponga la esperanza.
Que allá donde hay tinieblas, yo ponga la luz.
Que allá donde hay tristeza, yo ponga la alegría.

Oh Señor,
que yo no busque tanto ser consolado, cuanto consolar,
ser comprendido, cuanto comprender,
ser amado, cuanto amar.
Porque es dándose como se recibe,
es olvidándose de sí mismo como uno se encuentra a sí mismo,
es perdonando, como se es perdonado,
es muriendo como se resucita a la vida eterna.
Amén.



sábado, 3 de octubre de 2020

sábado. Día de La Virgen.

 

Nuestra Señora del Rosario.

Historia

Se cuenta que la Virgen María se apareció en 1208 a Santo Domingo de Guzmán en una capilla del monasterio de Prouilhe (Francia) con un rosario en las manos, le enseñó a rezarlo y le dijo que lo predicara entre los hombres; además, le ofreció diferentes promesas referentes al rosario. El santo se lo enseñó a los soldados liderados por su amigo Simón IV de Montfort antes de la Batalla de Muret, cuya victoria se atribuyó a la Virgen. Por ello, Montfort erigió la primera capilla dedicada a esta advocación.

En el siglo XV su devoción había decaído, por lo que nuevamente la imagen se apareció al beato Alano de la Rupe, le pidió que la reviviera, que recogiera en un libro todos los milagros llevados a cabo por el rosario y le recordó las promesas que siglos atrás dio a Santo Domingo.

En el siglo XVI, Pío V instauró su fiesta; además, agregó a la letanía de la Virgen el título de Auxilio de los Cristianos. Su sucesor, Gregorio XIII, cambió el nombre de su festividad al de Nuestra Señora del Rosario. A causa de la victoria en la batalla de Temesvár en 1716, atribuida por Clemente XI a la imagen, el papa ordenó que su fiesta se celebrase por la Iglesia universal. León XIII, cuya devoción por esta advocación hizo que fuera apodado el Papa del Rosario, escribió unas encíclicas referentes al rosario, consagró el mes de octubre al rosario e incluyó el título de Reina de Santísimo Rosario en la letanía de la Virgen.

Tanto la Virgen de Lourdes en su aparición de 1858 como la de Fátima en 1917 pidieron a sus aparecidos que rezasen el rosario. Gran parte de los papas del siglo XX fueron muy devotos de esta advocación, y Juan Pablo II manifestó en 1978 que el rosario era su oración preferida.

Promesas de la Virgen

Un creciente número de hombres se unió a la obra apostólica de Domingo y, con la aprobación del Santo Padre, Domingo formó la Orden de Predicadores (mas conocidos como Dominicos). Con gran celo predicaban, enseñaban y los frutos de conversión crecían. A medida que la orden crecía, se extendieron a diferentes países como misioneros para la gloria de Dios y de la Virgen.

El rosario se mantuvo como la oración predilecta durante casi dos siglos. Cuando la devoción empezó a disminuir, la Virgen se apareció a Alano de la Rupe y le dijo que reviviera dicha devoción. La Virgen le dijo también que se necesitarían volúmenes inmensos para registrar todos los milagros logrados por medio del rosario y reiteró las promesas dadas a Sto. Domingo referentes al rosario.

Promesas de Nuestra Señora, Reina del Rosario, tomadas de los escritos del Beato Alano[1]:
  • Quien rece constantemente mi Rosario, recibirá cualquier gracia que me pida.
  • Prometo mi especialísima protección y grandes beneficios a los que devotamente recen mi Rosario.
  • El Rosario es el escudo contra el infierno, destruye el vicio, libra de los pecados y abate las herejías.
  • El Rosario hace germinar las virtudes para que las almas consigan la misericordia divina. Sustituye en el corazón de los hombres el amor del mundo con el amor de Dios y los eleva a desear las cosas celestiales y eternas.
  • El alma que se me encomiende por el Rosario no perecerá.
  • El que con devoción rece mi Rosario, considerando sus sagrados misterios, no se verá oprimido por la desgracia, ni morirá de muerte desgraciada, se convertirá si es pecador, perseverará en gracia si es justo y, en todo caso será admitido a la vida eterna.
  • Los verdaderos devotos de mi Rosario no morirán sin los Sacramentos.
  • Todos los que rezan mi Rosario tendrán en vida y en muerte la luz y la plenitud de la gracia y serán partícipes de los méritos bienaventurados.
  • Libraré bien pronto del Purgatorio a las almas devotas a mi Rosario.
  • Los hijos de mi Rosario gozarán en el cielo de una gloria singular.
  • Todo cuanto se pida por medio del Rosario se alcanzará prontamente.
  • Socorreré en sus necesidades a los que propaguen mi Rosario.
  • He solicitado a mi Hijo la gracia de que todos los cofrades y devotos tengan en vida y en muerte como hermanos a todos los bienaventurados de la corte celestial.
  • Los que rezan Rosario son todos hijos míos muy amados y hermanos de mi Unigénito Jesús.
  • La devoción al Santo rosario es una señal manifiesta de predestinación de gloria.

Hoy, Jesús te dice: