Postrado ante tu acatamiento, ¡Oh Virgen de la Medalla Milagrosa! y después de saludarte en el augusto misterio de tu concepción sin mancha, te elijo, desde ahora y para siempre, por mi Madre, Abogada, Reina y Señora de todas mis acciones y protectora ante la majestad de Dios.
Yo te prometo, Virgen Purísima, no olvidar jamás, ni tu culto ni los intereses de tu Gloria, a la vez que te prometo también promover en los que me rodean tu amor.
Recíbeme, Madre tierna, desde este momento y sé para mí el refugio en esta vida y el sostén a la hora de la muerte.
Amén.
Blog católico en el que encontrarás citas bíblicas, textos relacionados con la religión y la espiritualidad católica cristiana, historias de vida, máximas o sentencias de santos y santas; en fin, todo aquello que sirva para fortalecer la fe y el crecimiento espiritual.
domingo, 3 de mayo de 2020
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
-
Tomado de ACI Prensa. Redacción Noticias del Mundo Hoy, lunes 29 de junio, se celebra la Solemnidad de San Pedro y San Pablo, día en...
-
En algunos países se celebra hoy la fiesta de Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote, festividad que no aparece en el calendario de la Ig...
No hay comentarios:
Publicar un comentario